Jordi Viladoms sigue en carrera a pesar de quedarse parado al principio de la etapa siete y llegar al campamento de noche tras arreglar una avería en su Husqvarna sin asistencia. El piloto de Igualada tomaba la salida sin apenas descansar, finalizando la octava etapa en 21º lugar, con un tiempo de 2h 26’08”.
El catalán no arroja la toalla, aunque el viernes pasó por momentos agónicos, tirado en medio de la nada, sin posibilidad de recibir asistencia técnica y con muy pocas herramientas. Aun así, después de varias horas de duro trabajo consiguió arrancar su moto y remprender la marcha hasta llegar al campamento de coches y camiones.
«Emprendí el camino hacia el vivac sabiendo que me atraparía la noche, pero intenté concentrarme en el pilotaje y en no arriesgar demasiado para no sufrir ninguna caída. La moto iba bien, pero conducir de noche me obligó a ir poco a poco. Se hace muy duro mantener la concentración después de tantas horas, pero lo intentaba y sólo centraba mi mente en cada metro que iba avanzando”, explica.
©Prensa Jordi Viladoms
Jordi Viladoms explica que pasó por momentos terribles: ”Cuando estás en carrera y es de día sabes que si pasa cualquier cosa siempre van pasando otros pilotos, ya sea de motos, coches o camiones. Pero, a parte de algún camión que había quedado sin poder acabar la etapa, sólo estaba yo, y eso hizo que me tomara las cosas con calma”.
Por si eso fuera poco, comenzó a llover e incluso a nevar por momentos, lo que acentuó la dificultad de su hazaña. “Con la lluvia y la nieve, la visibilidad pasó a ser aún menor. La verdad es que es terrible pilotar en esas condiciones, pero estaba dispuesto a acabar la etapa como fuera para poder seguir en carrera».
Llegó exhausto y con poca gasolina al campamento de coches, donde la organización optó por hacer una excepción y le permitió pasar allí lo poco que quedaba de noche, ante las durísimas condiciones meteorológicas. El catalán, que sólo pudo dormir 3 horas, fue penalizado con una hora extra.
En la general, el piloto del equipo Tamarugal XC está a casi 8 horas del líder David Casteau. Pero lo único que cuenta ahora es que continúa adelante en el Dakar 2013 y mañana disfrutará de una más que merecida jornada de descanso, mientras su mecánico David Palmada tratará de solucionar los problemas de la Husqvarna.
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