El piloto MAPFRE Aspar, Héctor Barberá, buscará dar continuidad al meritorio sexto puesto logrado en la última carrera en Jerez
Este fin de semana volverá la acción del Campeonato de MotoGP en el Circuito de Estoril. Han pasado ya tres semanas desde la última prueba en Jerez, y afortunadamente en unos pocos días los pilotos de MotoGP pondrán fin al parón ‘pascuero’. Aunque el Continental Circus cambia de escenario, no sale de la Península Ibérica, así que la afición española seguirá animando a nuestros pilotos para, si es posible, verles ganar el próximo domingo en el Gran Premio de Portugal. El año pasado la lluvia deslució la cita lusa, ya que obligó a suspender el entrenamiento oficial del sábado. El Circuito de Estoril es conocido por sus volubles condiciones atmosféricas, pero también por sus excelentes características, resumidas en 4.182 metros. Curvas enlazadas, frenéticas y lentas, subidas y bajadas, y una recta de casi un kilómetro que convierten a Estoril en un circuito muy exigente. Exigencias al margen, de momento el liderato de la general ya es cosa de la armada española de MotoGP, esperemos que lo siga siendo el próximo domingo.
©Aspar Team
Héctor Barberá salió indemne de la carrera del K.O. vivida hace tres semanas en Jerez. Y no sólo salió ileso y consiguió llegar a la meta pese a las nefastas condiciones del asfalto, sino que además lo hizo en una meritoria sexta posición. Fue una prueba complicada, en la que muchos pilotos acabaron rodando por los suelos. Aquélla supuso toda una lección de aprendizaje para el piloto MAPFRE Aspar, que se dirige a Estoril cargado de moral. Según él, Estoril es un circuito favorable para su pilotaje, en el que siempre consigue girar rápido con relativa comodidad. Así que espera cumplir sus pronósticos y completar un buen fin de semana. El año pasado fue décimo, éste espera concluir mucho más arriba en la tabla.
©Aspar Team
Héctor Barberá: «El objetivo en Portugal será mejorar la línea de trabajo de los entrenamientos. Sobre todo trataremos de evolucionar la puesta a punto de la Ducati, siempre pensando en la carrera, como hicimos en Jerez. La idea es intentar llegar a la carrera con el mejor ritmo posible, y siendo conscientes de nuestro rendimiento, para tener casi todo atado y no estar expuestos a grandes sorpresas. Estoril es un circuito que normalmente se me ha dado bien, y del que guardo muy buenos recuerdos. En mi primer año de Mundial rodé cuarto durante bastantes vueltas, pero me caí porque la pista estaba mojada. El año siguiente logré ganar la carrera. Siempre suelo cogerle el punto bastante pronto al circuito portugués y giro rápido con relativa facilidad, espero que así sea el próximo fin de semana. Durante las tres semanas de parón he aprovechado para seguir preparándome, llego muy motivado a la cita lusa».