El fin de semana del 21 al 23 de octubre se celebró en el Autodromo Intenacional de Algarve (Portimao), la tercera edición del Algarve Historic Festival.
Este evento incluía 21 carreras de 13 categorías diferentes, y algo más de 300 vehículos de competición en pista; con fechas de fabricación entre 1930 y 1990.

En este artículo no voy a entrar en detalle sobre los resultados de cada carrera (sería demasiado extenso).
Creo que será más interesante contar la experiencia personal que supuso asistir a este evento, y dejaros un buen número de fotografías (aparte de una galería con más de 3000 fotos que tenéis disponibles en www.rafa505.es apartado «Circuitos»)

Mis primeros viajes a Portugal fueron de adolescente, a mediados de los años 80 (en el asiento trasero de un Seat 131, o algo más tarde en un Peugeot 505); por aquel entonces las carreteras y la manera de conducir en el país vecino tenían fama (y no precisamente positiva).
Hoy día ( y ya al volante), para mi es una experiencia satisfactoria circular por Portugal. Las carreteras han mejorado muchos enteros (mis trayectos suelen ser por autovía), y el respeto con los demás conductores es el mismo o superior al que podemos encontrar en nuestras carreteras.

Por otra parte, circular en Portugal sin la presión del «gran hermano» que es nuestra DGT y el temor constante por nuestros puntos; permiten conducir de una manera más centrada en eso, en conducir, y no en estar permanentemente atento a señales, arcenes, radares y coches camuflados. Siempre dentro de unos límites adecuados a las circustancias de la vía.
Pues el viernes a mediodía y con 500 kms por delante, tomé rumbo hacía el Autodromo Internacional del Algarve, para asistir al Algarve Historic Festival 2011.

El Autoromo Internacional del Algarve se encuentra en las proximidades de Portimao, bien comunicado por carretera tanto con Lisboa, como con el sur de España.
Es un circuito moderno y con buenas instalaciones. En la pista podemos encontrar espectaculares rasantes, curvas ciegas, buenas rectas; y una tribuna principal enorme.
Tenéis toda la información y los detalles del circuito en su web www.autodromodoalgarve.com

Esta era la tercera edición del Algarve Historic Festival; a las dos anteriores no había podido asistir, ya que solía coincidir con el Campeonato de España de GT y la Super Copa Seat León (q.e.p.d.) que se celebra en similares fechas en el Circuito de Jerez.
Habia visto algunas fotos y algo de información a través de internet, de un evento que estaba tomando cierta relevancia en el panorama de la competición clásica en Europa. Su web es www.ahfportimao.com
Así que las expectativas eran buenas, y tenía una idea más o menos clara de lo que me iba a encontrar.
Lo que no esperaba era la sensación que tuve al bajarme del coche en el parking del circuito.

Nada más salir del coche, y coincidiendo con los entrenamientos libres de los grupo C; su impresionante sonido, y la emoción por poder verlos de cerca y en acción, literalmente me pusieron la piel de gallina. Pocas veces he sentido esa emoción en un circuito.
Desde un punto de vista personal, y habiendo vivido el gusto por el automovil desde pequeño, en casa, los coches que me atraen (hablando de clásicos de competición) principalmente son desde finales de los 70, a principios de los 90.

En mi infancia y adolescencia, parte importante de mi paga semanal se iba en comprar la revista Autopista; y a través de sus páginas disfrutaba de las crónicas de carreras de F1, del campeonato británico de turismos, o algo más adelante de los grupo C y las carreras de resistencia.
También, y como no era muy mal niño, los Reyes Magos dejaron algún Scalextric (ese GP 51 con los dos Tyrrell Ford), y alguna que otra vez también había algún coche «suelto». Aún recuerdo una tienda pequeñita, en la Alameda Principal de Málaga, donde se compraban repuestos, coches y demás.

Asistir el Algarve Historic Festival ha supuesto, en cierta forma, poder vivir aquellas experiencias que quedaban tan lejos cuando tenía entre las manos una «Autopista» recién comprada en el kiosko a finales de los 80.
Poder estar junto a un Tyrrell P34 de 6 ruedas y verlo en acción, el Tyrrell Ford de Stewart que aún conservo en escala 1:32 de Scalextric, o un espectacular Jaguar XJS con los colores oficiales con los que corrió el Campeonato de Turismos, o el Sauber Mercedes de grupo C que condujo Michael Schumacher, o el Porsche con el que Fermín Vélez corrió las 24 horas de Le Mans, y así un largo etcétera.
Sin desmerecer claro está a los vehículos anteriores a estas fechas, que tienen si cabe más valor de competir en un circuito, y de hacerlo tan dignamente como lo hacen.

Durante el sabado y el domingo, que se desarrollaron las carreras, había coches en pista durante 12 horas cada día, con espacios menores a los 10 minutos entre carrera y carrera. Simplemente espectacular.
Con una agenda tan apretada se echan de menos algunos eventos complementarios, aunque ambos días hubo desfile de vehículos clásicos, y firma de autógrafos; pero claro si estás viendo carreras, no tienes mucho hueco para otras actividades. No se puede tener todo.

Como conclusión, deciros que es un evento muy recomendable; no es Goodwood, pero lo tenemos muy cerquita, y resulta muy económico, tanto por el precio de las entradas (50 euros pase de paddock para 4 días), como por la logística (se puede ir en coche, y al ser temporada baja, el hospedaje es baratísimo; en mi caso, hotel cuatro estrellas con desayuno, 55 euros dos noches). Y como decía, sin ser Goodwood, en pocos lugares se reunen 300 coches clásicos de competición de tan variadas épocas.

Nos vemos en el Algarve Historic Festival 2012.