Hemos tenido la oportunidad de probar uno de los últimos modelos de Subaru; el crossover denominado XV.
Por cortesía de S. Ríos Racing (Grupo Gibralfaro Motor) hemos podido conducir un XV 2.0D.
Os dejamos algunos datos, antes de contaros nuestras impresiones al volante del XV.
Adaptado a la aventura urbana.
Lo primero que llama la atención es que la publicidad de Subaru se centra de manera importante en el uso urbano del vehículo. Una acertada visión comercial, ya que es más común ver un crossover en la ciudad que en el campo.
Está clara la tendencia del mercado, pero eso no quita que el XV sea un magnífico “carrilero”.
Si no te gusta tener el mismo coche que tu vecino
Otro de los mensajes que nos transmite la marca es la diferenciación del resto.
Hay un par de aspectos que lo hacen exclusivo en este segmento, sus motores bóxer (tanto en gasolina como en diesel), y que solamente está disponible en versión 4X4 (Subaru fabrica vehículos de tracción total desde 1972).
Motores y equipamiento
La gama la componen tres motorizaciones y cuatro acabados.
Dispone de dos motores de gasolina de 1,6 L y 114 CV y de 2.0 L y 150 CV así como de un motor diesel también de 2.0 L que rinde 147 CV.
Los acabados van desde el Advance al Executive Plus, pasando por el Sport y el Executive.
En cuanto a caja de cambios, la versión diesel monta una caja manual de 6 velocidades, y los gasolina equipan un cambio automático denominado “Lineartronic” (opcional en el 1.6)
Aire de familia
El XV tiene una estética llamativa y contundente, remarcada entre otros aspectos por sus llantas de 17” de color negro y perfil en aluminio (presentes en toda la gama), por sus pasos de rueda en símil fibra de carbono, o por su altura al suelo (22 cm)
Su aspecto robusto y de calidad, es personal pero con un importante aire de familia, ya que comparte línea de diseño y componentes con el Subaru Impreza 2012 recientemente presentado.
Con una longitud de 4,45 metros el XV es compacto lo que colabora en su perfil ciudadano en el que Subaru hace tanto hincapié.
Sin embargo, su interior es amplio y con un nivel de equipamiento razonable incluso en la versión base de gama. A los habituales controles electrónicos de tracción, estabilidad o arranque en pendiente, se le unen un buen número de elementos de seguridad que incluyen hasta los airbag de rodillas (ha obtenido 5 estrellas EuroNCAP); dejando opciones como el techo solar o la tapicería de cuero para el equipamiento de serie de la versión Executive Plus.
Sus mandos son sobrios, de calidad y convenientemente situados. El conductor recibe la información a través del cuadro de mandos y de una pantalla multifunción en la parte alta del salpicadero que agrupa ordenador de a bordo (con un buen número de funciones) y climatización.
Un poco más abajo en la parte central nos encontramos el equipo de audio o el navegador (según equipamiento) que incluye cámara de aparcamiento trasero.
Al volante
Realizamos un recorrido mixto repartido a partes iguales entre autovía, carretera comarcal de montaña y carriles; con algo de tráfico urbano.
Una vez al volante del XV, el tacto de sus mandos (dirección, cambio, frenos, etc.) es agradable y preciso.
El confort y firmeza de sus asientos son de buen nivel, así como la visibilidad desde el puesto de conducción.
Como dijimos al principio, el XV que hemos probado era un 2.0D equipado con el motor diesel de 147 CV y con cambio manual de 6 velocidades.
El motor responde bien en cualquier circunstancia, con potencia suficiente y buenos bajos (el par máximo de 350 Nm lo entrega a 1600 rpm)
Su comportamiento en autovía es ágil y rápido; y en carretera de montaña se desenvuelve con ligereza y buen aplomo en curva; es divertido de conducir y a pesar de su altura al suelo, el motor bóxer baja su centro de gravedad, lo que junto a sus suspensiones firmes y un chasis afinado (Subaru DC3) hacen que su comportamiento no sea muy diferente al de un compacto de tamaño y potencia similares.
Una vez llegado a la zona de carriles, su buena altura al suelo y sus neumáticos (la unidad probada equipaba unos de contacto) así como su tracción, le permiten sortear los imprevistos que nos podamos encontrar incluso en zonas donde la situación del terreno sea más complicada.
Como decíamos, el XV además del enfoque urbano que Subaru le ha dado, se mueve mejor que la media de sus competidores también fuera de la ciudad.
Consumos, emisiones y precio
La marca tiene homologado un consumo de 5,6 L/100 Km para el motor bóxer diesel, 6,6 L/100 Km en el caso del 2L de gasolina y pasando por los 6,3 L/100 Km del 1.6.
Las emisiones homologada son de 146 g/km para los motores diesel y gasolina 1.6; y de 153 g/km para el 2.0 L gasolina.
Sus precios van desde los 19.900 Eur. de la versión Advance, hasta los 31.000 Eur de la Executive Plus.
El Subaru XV es una buena opción para aquellos que aún siguiendo la moda, quieren distinguirse del resto. Con una estética personal y recursos técnicos diferentes a lo habitual.
El XV es un coche que se mueve muy ágil en ciudad o por carretera, pero que no se asusta al dejar el asfalto.
De interés:
Galería fotográfica completa en www.rafa505.es
Agradecimiento:
S. Ríos Racing (Grupo Gibralfaro Motor)
Concesionario oficial Subaru
C./Hermanos Lumiere, 6
29004 Málaga
E-Mail : gibralfaro.ventas@subaru.es