Pedro Burgo estuvo hizo un papel más que destacable, siendo el claro vencedor tras marcar todos los scrath del rally.

Ares finalizó la prueba en segunda posición, en una carrera sin incidencias que el equipo aprovechó como un gran “ensayo” de cara a la próxima temporada: “-En general el comportamiento del coche ha mejorado mucho con la nueva suspensión, pero tenemos que empezar de cero en muchos aspectos, ya que todavía tenemos que descubrir los reglajes óptimos para cada situación. Durante el rali hemos probado cosas y aunque no siempre hemos acertado, lo importante es haber tomado buena nota de todo ello. A nivel deportivo hemos intentado rodar a un buen ritmo y creo que la segunda plaza así lo demuestra. Sólo queda felicitar a Pedro y Marcos Burgo por su victoria y por el campeonato, aunque ya saben que el año que viene pensamos arrebatárselo.” El equipo baraja ahora cerrar la temporada en el 24º Rali Botafumeiro, prueba prevista para disputarse en Santiago de Compostela el primer fin de semana de diciembre, y que pondrá fin a la temporada automovilística gallega.

Luís Vilariño se ha quedado a las puertas del título en este rally. “Quiero felicitar a los hermanos Burgo y a todo su equipo por la excepcional temporada que han protagonizado. Son merecidos Campeones Gallegos”. No ha podido ser. A priori las cuentas daban una posibilidad a Luís Vilariño y Moncho López en su lucha por ser Campeones Gallegos de Rallyes, pero la victoria de Pedro Burgo en el 1º Rallye Ribeira Sacra ha sentenciado definitivamente este certamen. Pese a que todavía resta una prueba para terminar la temporada (el Rallye Botafumeiro) el Gallego de Rallyes ya tiene nuevo Campeón en esta temporada 2012.

“Pusimos todas nuestras esperanzas en ganar este Campeonato” aseguraba Luís al terminar la carrera con sede en la localidad ourensana de Luintra, “pero todas se esfumaron con el gran rallye que hizo Pedro, nuestro máximo rival. Por eso no puedo más que felicitarle por la victoria y el título, y dar las gracias a todo mi equipo por habernos permitido soñar durante esta temporada con un objetivo en el que estuvimos más cerca que nunca. Ahora centraremos nuestros esfuerzos en que Alberto Otero y Alberto Rodríguez consigan sus metas, también destacadas y muy positivas para el equipo Antalsis”

Burgo

©Chantada Racing – Fran Rodriguez Anido

El 1º Rallye Ribeira Sacra se saldó con la tercera posición para Luís Vilariño y su copiloto Moncho López. Un buen resultado porque, pese a problemas de rendimiento en el propulsor del Mitsubishi Evo X R4, lograron asegurarse un lugar en el podio final de esta prueba. “Desde el primer tramo la temperatura se disparaba por encima de los 120º y ello provocaba que la electrónica entrase en modo estrategia, impidiendo que el motor subiera de vueltas hasta que la temperatura no bajase a los parámetros óptimos. No había opción de arreglo, por lo que tuvimos que terminar así el rallye” comentaba el piloto del equipo Antalsis. Tocará, pues, revisión al propulsor antes de afrontar la última prueba de la temporada, a principios del mes de diciembre.

En lo tocante al Trofeo Pirelli, la ausencia entre los inscritos de Alberto Otero, unida a la quinta plaza conquistada por Javier Cousiño, dejan el título decidido a favor de este último. La gran sorpresa fue encontrarse en las dos primeras posiciones a los Renault Clio R3 pilotados por David González y Miguel Paredes, que convirtieron la carrera en un mano a mano.

Para ilustrar la competitividad reinante en este certamen, basta incidir en el dato de que después de dos días de competición y ocho tramos cronometrados, la diferencia que separaba a los dos primeros clasificados de la carrera (González y Paredes) era inferior a cinco segundos, estando el tercero (López) a poco más de quince.

Miguel Paredes comenzó liderando la carrera, al marcar el mejor crono en el primer tramo, pero Alberto López respondía siendo el más rápido en el segundo y defendiendo esa posición hasta el final de la primera jornada de carreras, por delante de David González y del mencionado Paredes (que habían perdido tiempo en el cuarto tramo, debido a diversos deslices).

Todo cambiaba al inicio de la segunda jornada, en un quinto tramo en que era López quien tropezaba (haciendo un trompo) y donde los Clio comenzaban a escaparse en cabeza, manteniendo una lucha al segundo que finalmente se decidía a favor del vigués González.