En los próximos días, los conductores que circulen por el túnel de Guadarrama, en Madrid y por el de Torrox, en Málaga, a una velocidad media superior a la permitida recibirán una carta informativa comunicándoles que han cometido una infracción que ha sido captada por un radar de tramo cuya sanción hubiera supuesto una multa de hasta 600 € y la detracción de hasta 6 puntos de su permiso de conducir, dependiendo del exceso cometido.

Esta carta informativa se enviará hasta el 1 de febrero, fecha a partir de la cual, cualquier conductor que circule por dichos tramos a una velocidad media superior a la permitida (100 km/h) será sancionado y recibirá una multa con el importe
correspondiente.

Los nuevos puntos de control de velocidad mediante radar de tramos, controlan la velocidad media de los vehículos que circulan en un determinado tramo de carretera.

Los nuevos radares están ubicados:
• En el túnel II de Guadarrama, en la Autopista del Noroeste, AP-6, (punto kilométrico 53, 500, boca de entrada del túnel y en el pk 57, boca de salida del túnel) sentido A Coruña. Por lo tanto el tramo controlado es de 3,5 kilómetros.
Velocidad limitada a 100 km/h.
• En el túnel de Torrox, Málaga, en la Autopista del Mediterráneo, A-7 (PK 287,750 boca de entrada del túnel y en el PK 288,750 boca de salida del túnel) sentido Barcelona. El tramo controlado es de 1 kilómetro.
Velocidad limitada a 100 km/h.

El objetivo de la puesta en marcha de estos radares de tramo es la seguridad, ya que los túneles son tramos especialmente peligrosos y en donde la seguridad se haya más comprometida y en caso de accidente implican un mayor riesgo en el rescate.

La velocidad inadecuada o excesiva es una de las causas principales de los accidentes de tráfico que está presente en uno de cada cuatro accidentes mortales.

¿Cómo funcionan?
El modo de funcionamiento de estos dispositivos es sencillo. Constan de dos cámaras de visión artificial infrarrojas situadas en cada uno de los carriles e instaladas una al comienzo y otra al final del tramo a vigilar.

Estas cámaras graban todos los vehículos que pasan por el túnel y registran el momento en que cada vehículo entra y sale del túnel, así como su matrícula. Con los datos recogidos por las cámaras, un ordenador comprueba el tiempo que cada
vehículo ha tardado en cruzar el túnel y calcula su velocidad media. Si la velocidad es superior a la fijada en el tramo (100 km/h), la fotografía del vehículo infractor se remite por fibra óptica al Centro de Tratamiento de Denuncias Automatizadas de León, en donde se tramita el correspondiente sancionador cuya primera notificación se remitirá al titular del vehículo en un breve periodo de días para que se identifique al conductor responsable de la infracción.

En este tipo de radares todos los sensores están interconectados, de modo que no sirve de nada cambiarse de carril, ni frenar justo antes de la cámara instalada al final del túnel, ya que lo que mide es la velocidad media a la que se circula por dicho tramo.

Los nuevos radares de tramo, estarán señalizados, como es compromiso de la DGT, en los paneles luminosos o con señal vertical fija, a través de los que se informa al conductor de la presencia de dicho control de velocidad.

Este tipo de radar que es el que se tiende a instalar en los diferentes países de la Unión Europea, es más justo y razonable que los radares fijos, ya que evitan la frenada de aquellos conductores que pisan el freno cuando ven un radar fijo, al tiempo que evita que un conductor que conduce habitualmente correctamente sea sancionado por un despiste en un momento dado.

Fuente:DGT